Andalucia Bike Race 2016, la tercera.

Después de un año ausentes, volvemos a tierras andaluzas dentro de la estructura del equipo Iberobike Vitoria Bikes by Atika, a disputar la que seguramente es, la mejor carrera por etapas del btt nacional.
Quedamos a primera hora en Monreal y después de hacer un tetris conseguimos meter bicis y megamaletas en el coche para emprender camino destino Jaén, el viaje es largo y no nos podemos entretener mucho para poder llegar a retirar el dorsal y acomodarnos en la que dicen es, capital mundial del aceite de oliva.

Intentando hacer un poco más llevadero el viaje

El ambiente en la zona de salida es increible, multitud de equipos con todo su despliegue dan un colorido muy especial al lugar, una vez ubicados en el hotel saldremos a probar las bicis para no encontrarnos con ninguna sorpresa a la hora de afrontar la primera etapa.

Con Joseluis en el Recinto Ferial de Jaén

Para la primera etapa la organización ha dispuesto una interesante crono de 50 km con salida y llegada en la localidad de Martos. Es domingo y tanto en la zona de salida- llegada como a lo largo de todo el recorrido hay mucha gente viendo la carrera y animando a todos los corredores.
Nosotros saldremos con cabeza, rápidos pero sin ir a tope, viendo el perfil hay que ir guardando para afrontar una importante subida que tenemos a mitad de etapa.

 Nos han pasado un par de equipos mixtos pero no nos obsesionamos, en la parte final de la etapa volveremos a contactar con ellos y llegaremos a meta. Ocuparemos la octava posición dentro de nuestra categoría, contentos con el resultado.
La segunda etapa fué muy complicada para nosotros, en el desayuno Clara empieza a encontrarse mal y termina sin apenas tomar nada y lo que es peor, vomitando la cena de la noche anterior. Los síntomas de la gastroenteritis sufridos la noche anterior se manifiestan de una forma incuestionable y para hoy tenemos la etapa más complicada en cuanto a kilómetros y desnivel. Paciencia.

La belleza paisajística del lugar es indudable

Desde la salida vemos que no podemos ir rápido y van pasando los grupos sin que podamos ir con ellos. Nuestro objetivo es ir pasando la etapa y poder completarla para poder recuperar la salud de cara a las siguientes jornadas. Las molestias gástricas obligan a Clara a parar en varias ocasiones, pero ni esto, ni una inesperada caída a escasos km de meta pueden con ella, y haciendo gala de un gran amor propio  finalizamos la etapa. Terminamos el día a las 23 h. saliendo de urgencias donde le administraron un primperan pinchado que nos dio el resultado buscado.
Para la tercera etapa, Andújar, a mitad de camino entre Jaén y Córdoba. Estas jornadas de traslado te obligan a ir un poco más pendiente del reloj por aquello de los preparativos y no llegar justos de hora para preparar el material, y calentar  sin prisas antes de salir a disputar la etapa.

Grandes olivares

Nada más tomar la salida nos damos cuenta de que Clara ha recuperado la salud, a pesar de salir en el último cajón, a consecuencia del tiempo perdido la jornada anterior, empezamos a adelantar equipos e irnos posicionando donde nos merecemos.
A mitad de etapa afrontamos la subida más importante del día por pista.

 Se trata de una subida larga y tendida, sabemos que este es nuestro terreno e intentamos aprovechar para poner nuestro ritmo. Nos encontramos con ganas y las fuerzas nos acompañan, hemos disfrutado a lo largo de toda la etapa. Antes de llegar a meta tenemos la bajada de los caracolillos, nos la tomamos con calma sin asumir ningún riesgo. Con fuerza durante los últimos kilómetros planos llegaremos a meta. Muy contentos por recuperar las buenas sensaciones y disfrutar de un recorrido muy apropiado para la btt.

Ya estamos en el ecuador de esta edición de la ABR, y los peores momentos ya han quedado atrás

El hotel de Córdoba lo hemos reservado en la zona centro y nos complica un poco el "desembarco", llevamos un montón de equipaje y las bicis. La gentileza de la gente del sur es sorprendente, un camarero que nos ve apurados se apresura a venir hacia nosotros ofreciéndose voluntario para guardarnos las bicis en su local mientras nosotros vamos con el resto de bultos al hotel, sin palabras nos dejó. Le devolvemos el gesto bajando a cenar horas más tarde a su establecimiento.
La cuarta etapa tiene la salida muy cerca de nuestro hotel, en la zona histórica de la ciudad, muy próximo a la mezquita, sin ninguna prisa llegaremos con tiempo para buscar nuestro cajón e ir preparándonos para afrontar la primera de las tres etapas por aquí.

Los primeros km neutralizados por la ciudad nos permiten calentar un poco antes de empezar a rodar fuerte paralelos a un canal que nos encamina hacia Sierra Morena.

Auténtico mtb el que hemos vivido a lo largo de la etapa, muchísima senda ratonera que no te permite un segundo de relax.

Hemos ciclado varios km por una vía de ferrocarril fuera de uso, por encima de las traviesas se te mueven hasta los empastes, íbamos todos deseando salir de allí lo antes posible. Para terminar hemos bajado una gran clásica de la zona,  El Reventón, un largo descenso con mucha piedra que pone a prueba la pericia de los bikers y la mecánica de las monturas. Nosotros la afrontamos con precaución y la superamos sin sufrir percances de ningún tipo.
La penúltima etapa es muy similar a la anterior, hemos estado por la misma zona pero no hemos repetido ninguna senda, muy variada y divertida.

Sendas y más sendas

El hecho destacable de esta etapa fué hacer mío un problema que no lo era, y lo volvería a hacer de nuevo si se me volviese a plantear. A los pocos kilómetros de salir me encuentro con un amigo que está disputando el podium en master-40 pinchado, le ofrezco mi rueda sin pensármelo un segundo para que puedan continuar sin tener que esperar a reparar. Yo me quedo con la suya, y a reparar para continuar, el problema aparece cuando al meter mi cámara en su aro ligeramente perfilado, la válvula no sale lo suficiente para poder hinchar. Ayudado por unos chavales que están viendo la carrera lo intentamos y no hay manera. Me acuerdo que en el bidón donde llevo el material para reparar llevo un adaptador de válvula, este pequeño artilugio fue la solución, menos mal.

A partir de aquí salgo dándolo todo para intentar pillar a Clara antes del punto de control para pasarlo juntos y no penalizar, cuando llego me dice que lleva más de 10 minutos esperando. En este momento, ya juntos y un poco desmoralizados por la perdida de tiempo continuamos hasta meta tomándonos la etapa con relativa tranquilidad.

Las sendas estaban con el grado de humedad perfecto para ir rápidos y con seguridad

La gran recompensa del día fué quedar con Iker para hacer el intercambio de ruedas y recibir el agradecimiento de primera mano, lo dicho anteriormente, no me arrepiento de nada, ni mucho menos.

Ya en meta, al fondo la sierra por donde hemos transitado a lo largo de la etapa

Para la última etapa la organización diseño una etapa un poco más corta, pero no menos atractiva que las precedentes por la misma zona de la sierra próxima a Córdoba. Comenzamos con El Reventón, pero en esta ocasión en sentido ascendente. Una subida enfilados tan cerca de la salida implica paradas por ir rodeados continuamente de corredores, con paciencia para arriba.

Para esta última etapa daban lluvia a partir de las 13 h, y se cumplió, los últimos km los hicimos con una ligera y fresca sensación de humedad.

El cielo ya se iba encapotando, aún así, las dehesas de la sierra se mostraban en todo su esplendor.

La última bajada hacia meta discurría por una senda paralela a la de los días anteriores, nos la tomamos con seguridad. A pesar de ello Clara hizo la croqueta sin que su integridad física sufriese daños destacables, decir que las piedras estaban muy resbaladizas.

En meta con el Finisher en mano.

La valoración general de la carrera, viendo como se nos complicó en la segunda etapa, es muy positiva. El único día que salimos con motivación para disputar fué la primera etapa y el resultado es muy bueno para nosotros como equipo Dúo Mixto.

 Esperamos seguir creciendo para poder enfrentarnos a nuestro próximo reto con garantías, será a finales de marzo en la Vuelta Ibiza BTT.

Nuestras Vitoria Sioux no nos han dado ni un solo problema, se muestran ligeras subiendo y cómodas y seguras en tramos más rápidos, estamos encantados con el rendimiento que dan en carrera.

Agradecimiento muy especial para Felipe, nos ha acompañado durante muchos km, ha ejercido de fotógrafo y nos ha prestado su ayuda y compañía en los momentos más duros de la carrera. MUCHAS GRACIAS