En el primer traslado, misteriosamente, se abre la puerta de la mini-nevera que dispone el vehiculo, y el taperware de macarrones que nos ha preparado mi madre se desparrama a lo largo y ancho del incómodo habitáculo de la casita con ruedas. Mal comienzo.
Una vez en Las Rozas, nos juntamos con el resto de miembros del equipo Raidcalamocha.com y comienza la siempre pesada tarea de acreditarnos y recoger dorsales.
Aquí nos encontramos con Manu Tajada, responsable de la organización, a quien conocemos de otras guerras y nos cuenta algo de la carrera. También me encuentro con Jose Luís, mi compañero en la Andalucia Bike Race, que va a correr con otro equipo de tres integrantes (hizo una gran carrera).
Con los papeles en regla, nos vamos para la autocaravana a dar cuenta de la tortilla de patata y de los lomos empanaos que ha preparado Ana (como siempre riquísimos, muchas gracias). Entre bocado y bocado vamos colocando dorsales en nuestros maillots y monturas para ir adelantando algo de faena.
Llegados a este punto, no podía pasar sin hacer mención a la mesa que nos trajo el montañes, tuvimos que cenar a turnos, no cabiamos todos, la mesa de los pin y pon es más grande que la nuestra. A consecuencia de ello, le desaparece el rascador de espalda y se ve obligado a ir buscando esquinas durante todo el finde donde restregarse la lomera cual oso pirenaico. Para que aprenda.
Cuando llega el momento de ir a dormir pasamos a discutir lo de usar el wc o hacerlo en el campo, por mayoría se decide colaborar con la naturaleza abonando todo lugar por donde pasemos, decisión acertada a mi entender. A continuación Juani nos ameniza el rato mostrando toda la basura que lleva en el móvil, sin comentarios.
Cuando por fín se siente algo de silencio y empiezan a pesar las pestañas, se escuchan varios sonidos de origen desconocido, que terminan de cargar la atmósfera del furgón, ayudando a conciliar el sueño a los allí presentes.
A la mañana siguiente comenzamos con los típicos cagaprisas que no pueden dormir y se dedican a molestar al resto del mundo haciendo todo tipo de ruidos, a sus madres les tienen que pitar los oidos en esos momentos que no veas.
Rodrigo empieza a gustarse, se crece y despierta a todo el equipo con los clásicos cachiporrazos, que en la pared del baño suenan bastante bien dada la poca consistencia de la misma.
Una vez desayunados, con el colacao que nos ha traido Juani, caducado en el 2009, nos vamos a la reunión con la organización donde nos comentan las últimas modificaciones del desafio.
Nuestro primer relevo va a ser el anteriormente nombrado Juani, el del colacao, quien antes de tomar la salida, para comprobar el correcto funcionamiento de su bici, se da unos paseo por la zona de estacionamiento. Hacer constar que la prueba la realiza ataviado con peluca y gafas siendo el hazmereir de todos los presentes, quienes a su vez se percatan del buen ambiente que tiene el equipo y que va a reinar durante todo el finde. Testigo de lo aquí contado es Javier, amigo personal de Juani, a quien le agradecemos su compañia en la salida.
Logramos convencer al corredor para que se guarde los disfraces para las verbenas de la Peña la Unión y lo mandamos al ruedo de la plaza de toros de Las Rozas, donde se toma la salida.
Con puntualidad se da la salida y nosotros nos diriguimos en el vehículo a la primera Estación de Hidratación, Robledo de Chavela, bonita localidad del noroeste de Madrid, donde estacionamos el furgon debajo de un gran chaparro para escapar un poco del sol que a mediodia calienta de lo lindo.
Nuestro primer relevo hace una buena sección y yo paso a ser el siguiente corredor. Sin tener casi tiempo para calentar me veo en carrera con los ojos en la mano, salgo a rueda de un corredor que parece que no lleva cadena, vamos a fuegooooooooo. Menos mal que la chispa le dura poco rato y en el primer repecho fuerte se hunde, estaba deseando.
Me junto con otro corredor y vamos haciendo camino y cogiendo corredores sueltos. El último grupo que adelantamos es el de los tres equipos de Fuji de los Hermanos Anguita, viejos conocidos de la Titan Desert, hay tiempo para intercambio de saludos y a continuar pedaleando.
En la última gran subida de la sección se hace la selección y nos vamos marcando cada uno nuestro ritmo. Desde aquí es cuestión de activar el piloto automático y llegar al siguiente control.
Antes pasaremos por un embalse que hay en el rio Alberche, donde todos nosotros hemos estado compitiendo en el Raid de Avila, organizado por el primo de Juani, un tal Eusebio. Grandes recuerdos me vienen a la cabeza al pasar por allí, el sitio es muy bonito.
Aún tengo tiempo para adelantar a un corredor del MMR que va con la rueda en el suelo, le ofrezco ayuda y me dice que continue, que llegará asi al control.
Me espera Miguel Angel, quien va a salir en Burgohondo tarde ya que tienen un problema con el gps, problema que podía estar solucionado si se hubiesen evitado el pincho de tortilla por el camino para llegar con tiempo y poner a punto el material. Al poco tiempo se soluciona y sale como un tiro.
Esta prueba es un poco estresante, no da tiempo a nada. Nada más llegar me veo de nuevo en la autocaravana sin tener tiempo ni para quitarme la ropa sudada.
Llegamos al siguiente punto de cambio y tengo el tiempo justo para darme un agua (gran invento la duchita de este cacharro). Instalamos el track en el gps que nos ha dejado mi hermano y se lo coloco a Rodrigo en su bici para que lo salga a probar, después de unos pequeños ajustes todo ok. El culeras no tiene otro momento para decidir cambiar el tubeless delantero de su hierraco, por suerte talona a la primera sin problema, ya está preparado para dar el relevo a Miguel Angel.
El discípulo va a hacer una gran sección y se va a presentar en la siguiente punto de cambio habiendo superado a varios rivales. Vamos como tiros.
Salimos hacia el siguiente punto, carretera de montaña con mucha curva donde el paso de kilómetros es muy lento, nos dirigimos hacia El Barco de Avila y el puerto de Tornavacas. Lugares también conocidos donde nos vimos obligados a abandonar en un Raid de Gredos (espina clavada).
Por fín, después de descender al valle del Jerte, llegamos al siguiente control. Juani prepara el material y al poco rato aparece Rodrigo, muy buena sección, ha superado a varios equipos jugándose el tipo en la última bajada. Es de noche y Juani ya sale con frontal.
Vuelta al vehículo, vamos al lado de Plasencia, donde tomaré yo el relevo. Una vez allí Miguel Angel nos trae unos bocatas calientes de los cuales daremos cuenta en cuatro dentelladas, el cuerpo comienza a estar cansado de geles y barritas.
En este punto de la carrera pega mucho viento, motivo de preocupación, no sé como me pegará cuando salga, 80 km con aire de cara y de noche se pueden hacer muy duros.
La oscuridad de la noche me permite aliviar las tripas con cierta discrección, limpito me preparo para ir a la salida a esperar a Juani.
Aquí nos juntamos de nuevo con el equipo de mi amigo soriano, "espatarraos" en una acera comentamos los posibles proyectos para la temporada del año que viene. No veas como se disfruta cada momento de relax cuando estás en carrera.
Juan Ignacio se presenta muy rápido con otros tres corredores, seguimos manteniendo la posición.
Yo salgo acompañado de otros corredores, Rodrigo me ayuda con todo el preparativo, y a dar pedales de nuevo, mientras arranco escucho el grito animándome de Jose Luís: "VAMOS MAÑOOOOOO"
Gracias a los frontales que llevamos se puede ciclar con bastante seguridad, lo peor es el polvo que levantan las ruedas de los compis que van delante. Hacia mucho tiempo que no montaba en bici por la noche, la sensación es de ir muy rápido. En el grupeto que hemos formado hay buen rollo, se avisa de los peligros de las pistas y vamos pasando al relevo donde el terreno lo permite.
Sin darnos apenas cuenta llevamos media etapa, nos presentamos en un pueblo en fiestas, pasamos por la plaza; ferias y bolingas que corren a nuestro lado gritando, y nosotros a lo nuestro, dar pedales.
Se debe de tratar de una zona de Dehesa, nos vemos obligados cada poco tiempo a saltar muros y parar para atravesar puertas. Pasamos al lado de vacas enormes con gran cornamenta que no se inmutan, menos mal.
En el grupo va un corredor con el maillot de Suiza a quien yo bautizo como Cancellara que nos lleva a todos fuera de punto, nos está dando la noche.......
Atravesamos una zona muy dura, un continuo sube-baja, con más de 60 km en las piernas se hace duro pero el grupillo se mantiene unido. Hacer constar que el viento que tanto preocupaba molesto muy poco.
Cuando tenemos Alcántara a la vista se me acaba la batería del frontal, mal momento, uno de los integrantes del grupo me dice que no pare a cambiarla que me coloque delante suyo y hasta el siguiente control. Así lo hago y aunque en algún momento puntual la única luz que me iluminaba era la de la luna, logramos llegar al control sin sufrir ningún percance.
Una vez allí veo a Miguel Angel esperando para continuar, le doy el testigo y sale con frontal a muerte con tres corredores más.
De nuevo a la autocaravana, ducha y para la frontera portuguesa donde Rodrigo tomará el relevo. De camino tengo que comer e hidratarme, el cansancio se empieza a sentir y me quedo dormido en el trayecto. Me despierto y comienzo a sufrir calambres, no le doy importancia e intento descansar lo máximo posible.
Al lado de esta Estación de Hidratación hay un bar donde tomamos un bocata recien hecho y un café con leche calentito que sabe a gloria. Con las primeras luces del día llega Miguel Angel acompañado de Ramirez Abeja (Ex-profesional de carretera), grandísima etapa del discípulo, vamos quintos!!!!
Sale Rodrigo y también hace una gran sección, mantiene posición, comenta que la ha realizado en su totalidad con el miembro del equipo Mondraker, compañero del Abeja, que va sin gps y se ha pegado a nosotros.
Ya en territorio portugues en su totalidad la penúltima etapa la hace Juani, quien mantiene posiciones y a pesar de llegar al cambio tocado se pega un etapón guiando a su acompañante.
A su llegada comenta que hace mucho calor y que pega aire.
Aquí tomo yo el relevo, creo que me encuentro bastante bien, y salgo acompañado del Mondraker, quien no lleva gps y se viene conmigo para no perderse. Los primeros 30 km discurren por pistas anchas entre eucaliptus, vamos dando relevos y haciendo camino.
En una población me despisto un poco y cuando llevamos unos 300 m me doy cuenta de que nos tenemos que dar la vuelta, nos hemos pasado el cruce, momento en el que nos adelanta un corredor, es del equipo de Toledo con quien nos jugamos la tercera plaza por equipos de 4 miembros. Mal.
Yo me empiezo a encontrar vacio y me pongo a rueda de mi acompañante durante unos kilometros como y bebo todo lo que puedo pero las sensaciones son muy malas, apajarao perdido.
Vamos pasando kilometros, no sin sufrir, y cuando estamos más o menos por el 50, mitad de etapa, sigue pegando de cara y los 35 grados más la humedad me están dejando ko.
En unos de los miles de cruces que nos vamos encontrando por el camino, fruto de la tostada que llevo, no tomamos la dirección correcta y cuando me entero han pasado varios km. Mi compañero de aventuras se pone de mal humor y me dice que lo único que tengo que hacer es mirar el gps, no me enfado con él, le digo que continue y al poco tiempo recuperamos el track. Esta persona en su blog comenta que gracias a su sentido común volvimos al track, yo creo que fué gracias al garmin, pero vamos...........
Aquí nos volvemos a encontrar con el de Toledo, quien dice que se ha confundido también. El del Mondraker se va con él y me quedo solo. Cuando todavía los tengo a vista, en el primer cruce, se van por la dirección equivocada, si no les aviso yo no sé cuando se hubiesen dado cuenta (de esto el del Mondraker en su blog personal tampoco cuenta nada, en fin......)
Me pasan animándome y les digo que intentaré llegar como pueda a mi ritmo, me resulta imposible ir con ellos. En este momento comienza mi odisea personal, casí 50 km, aire de cara, 35 grados y apajarao, vamos "palante" como sea!!!!!
Sin dar una pedalada más fuerte que otra van pasando lentamente los kilómetros, no me puedo poner de pie en la bici, se me acalambran también los brazos, debo ir muy mal.
Me veo obligado a pararme un par de veces, me viene justo para poder mantenerme sobre la bici, me acalambro a la mínima.Sufriendo como nunca logro entrar en Lisboa, cualquier repechillo se me hace durísimo, se me podrìa subir un caracol por la rueda, voy parado.
Ver el puente Vasco de Gama me anima un poco, ya que me acordaba de unas vacaciones con Lurdes por Lisboa de que la zona del Parque de las Naciones está antes del gran puente. Poco a poco voy llegando.
Por lo tocado que voy no puedo disfrutar de pedalear los últimos km por un parque lineal que hay pegado al tajo, y al ver las banderas de Powerade en meta me empiezan a venir emociones a la mente y me cuesta contenerlas.
Tengo al equipo esperandomé en meta y al llegar me vengo abajo, no puedo más, me he exprimido a muerte y he perdido varias posiciones y el podium por equipos de cuatro, la única satisfacción es que lo he dado todo, aunque ha servido para muy poco.
A partir de aquí poco más que contar, dar las gracias a mis compis de equipo por compartir la carrera juntos y si lo repetimos espero poder llegar con mejores piernas.
Terminamos los 9º en la general y cuartos por equipos, sabor agridulce.
Señalar que en el viaje de vuelta, con Rodrigo al volante, nos pasamos un peaje de la autopista lusa por la salida de telepeaje sin llevarlo. A continuación, el que suscribe tomo los mandos y nos vimos obligados a buscar el límite a la autocaravana mientras circulabamos por la autopista , a pesar de ello NO llegamos a tiempo a Trujillo para comer en la Troya, donde nos cerraron la puerta en los bigotes. Asimismo señalar que tambien le buscamos el límite "a fuego" a los 3.20 m de la capuccina, 210 €, recuerdo de una balconada de la ciudad extremeña.
Y esto fue todo.
Hasta la próxima.
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